Fichas de ayuda para la sustitución: la sustitución como medida más efectiva

La colección Fichas de ayuda para la sustitución: la sustitución como medida más efectiva está formada por una serie de folletos monográficos sobre sustitución para los principales agentes químicos cancerígenos, mutágenos o reprotóxicos que se pueden encontrar de forma más habitual en los lugares de trabajo.

En esta colección, que acompaña a la colección Agentes cancerígenos en el trabajo: conocer para prevenir, se puede encontrar información sobre herramientas de ayuda para la sustitución, así como algunas referencias con carácter no exhaustivo, para la sustitución de cada uno de los agentes en los principales sectores de actividad con riesgo de exposición.

Este material constituye una herramienta útil para facilitar y fomentar la sustitución de los principales agentes cancerígenos, mutágenos o reprotóxicos presentes en los lugares de trabajo, ocupando dicha medida el primer puesto en el orden de prioridad de la acción preventiva.

¿Qué es la sustitución?
Herramientas para la sustitución ...

Formaldehído

La exposición a formaldehído puede provocar diferentes efectos perjudiciales para la salud. Por ejemplo, su inhalación puede producir cáncer de nasofaringe. Podemos encontrar este agente en los laboratorios de anatomía patológica, en la industria de fabricación de tableros, plásticos y textiles y en lugares de trabajo como hospitales, salas de tanatopraxia o plantas procesadoras de alimentos, entre otros.

Benceno

El benceno está presente en la fabricación de productos químicos, como fármacos, detergentes, pinturas, adhesivos, etc., también se añade a la gasolina para aumentar su octanaje. Es un cancerígeno y mutágeno capaz de producir leucemia y otros tipos de cáncer, por lo que es muy importante adoptar las medidas preventivas necesarias cuando está presente en los lugares de trabajo.

Cromo (VI)

La exposición laboral a los compuestos de cromo hexavalente, Cr (VI), puede provocar cáncer de pulmón, cáncer del seno nasal y otros efectos perjudiciales para la salud. Dentro de los compuestos de Cr (VI) se incluye un extenso grupo de elementos químicos con propiedades diferentes y con capacidad para formar sales muy coloreadas e insolubles, lo que hace que sean de gran aplicación industrial. De esta manera, podemos encontrarlo en muy diversas ocupaciones y, por ello, es necesario conocer y aplicar las medidas preventivas más adecuadas para eliminar, reducir y controlar el riesgo de exposición y, en consecuencia, evitar daños irreversibles en la salud de las personas trabajadoras.

Sílice Cristalina Respirable

Inhalar sílice cristalina de tamaño respirable aumenta la probabilidad de desarrollar cáncer de pulmón. Este riesgo puede existir en la minería, la construcción, las fundiciones y la fabricación de cerámica y ladrillos, entre otros sectores.

Emisiones de motores diesel

La exposición a las emisiones de motores diésel puede producir cáncer de pulmón. Existen medidas preventivas dirigidas a evitar o a minimizar esta exposición en los distintos sectores productivos en los que está presente este riesgo.

Formaldehído

La exposición a formaldehído puede provocar diferentes efectos perjudiciales para la salud. Por ejemplo, su inhalación puede producir cáncer de nasofaringe. Podemos encontrar este agente en los laboratorios de anatomía patológica, en la industria de fabricación de tableros, plásticos y textiles y en lugares de trabajo como hospitales, salas de tanatopraxia o plantas procesadoras de alimentos, entre otros.

Polvo de maderas duras

Inhalar el polvo que se produce al trabajar las maderas duras no es inocuo y puede provocar daños para la salud al entrar en contacto con el tracto respiratorio, la piel o los ojos. Puede producir, por ejemplo, cáncer de los senos nasales. Este tipo de cáncer se puede prevenir si se adoptan correctamente las medidas de prevención adecuadas en las empresas donde existe este riesgo.

Benceno

El benceno está presente en la fabricación de productos químicos, como fármacos, detergentes, pinturas, adhesivos, etc., también se añade a la gasolina para aumentar su octanaje. Es un cancerígeno y mutágeno capaz de producir leucemia y otros tipos de cáncer, por lo que es muy importante adoptar las medidas preventivas necesarias cuando está presente en los lugares de trabajo.

Aceites minerales usados en motores

El uso de los aceites minerales para lubrificar y refrigerar los motores de combustión interna hace que aumente su contenido en hidrocarburos aromáticos policíclicos, unas sustancias químicas que hacen que puedan provocar cáncer de piel, por ello es importante adoptar medidas preventivas para evitar la exposición dérmica a este agente.

Cromo (VI)

La exposición laboral a los compuestos de cromo hexavalente, Cr (VI), puede provocar cáncer de pulmón, cáncer del seno nasal y otros efectos perjudiciales para la salud. Dentro de los compuestos de Cr (VI) se incluye un extenso grupo de elementos químicos con propiedades diferentes y con capacidad para formar sales muy coloreadas e insolubles, lo que hace que sean de gran aplicación industrial. De esta manera, podemos encontrarlo en muy diversas ocupaciones y, por ello, es necesario conocer y aplicar las medidas preventivas más adecuadas para eliminar, reducir y controlar el riesgo de exposición y, en consecuencia, evitar daños irreversibles en la salud de las personas trabajadoras.

Amianto

Debido a sus excelentes propiedades y su bajo coste, el amianto fue ampliamente utilizado en España durante el siglo XX y hasta su prohibición total en diciembre de 2002. No obstante, el uso de materiales con amianto instalados o en servicio antes de esa fecha sigue estando permitido hasta su eliminación o fin de su vida útil, por lo que actualmente puede encontrarse formando parte, por ejemplo, de instalaciones, equipos o edificaciones. El amianto es un agente cancerígeno que puede provocar graves efectos para la salud cuando sus fibras son inhaladas. Por ello, es de especial importancia adoptar medidas que reduzcan la liberación y dispersión de las fibras de amianto en el aire y evitar así la exposición de los trabajadores.

Acrilamida

La acrilamida es una amida insaturada de origen orgánico y antropogénico que se emplea principalmente como producto intermedio en la fabricación de otras sustancias orgánicas que intervienen en otros procesos industriales, como la producción de papel, tintes y plásticos, y en el tratamiento del agua potable y de las aguas residuales e industriales, entre otros. La exposición laboral a la acrilamida puede incrementar el riesgo de padecer diferentes tipos de cáncer, así como ocasionar daños neurológicos. En el cuerpo humano, se convierte en una sustancia denominada glicidamida, la cual puede causar mutaciones y daños en el ADN. Por todo ello, resulta de especial importancia conocer y aplicar las medidas preventivas más adecuadas para evitar daños irreversibles en la salud de las personas trabajadoras.

Cadmio

El cadmio es un metal con gran variedad de usos a nivel industrial. La exposición laboral puede darse principalmente por la inhalación del polvo y del humo de compuestos de cadmio generados en los procesos de trabajo. Esta exposición puede provocar efectos perjudiciales para la salud de la población trabajadora tales como: cáncer de pulmón, próstata, riñón e hígado. Además, se sospecha que puede provocar defectos genéticos, que puede perjudicar la fertilidad y que puede dañar al feto.
Por ello, será fundamental adoptar medidas preventivas oportunas en aquellos lugares de trabajo donde exista o pueda existir exposición a este agente.

Berilio

Debido a sus propiedades fisicoquímicas, el berilio es empleado en la industria en aplicaciones muy específicas, como en diagnósticos médicos, reactores nucleares o aplicaciones aeroespaciales en las que se requieren estructuras ligeras resistentes a la deformación bajo altas tensiones y/o temperaturas.
La exposición laboral a berilio puede causar enfermedad sistémica por inhalación. Tras su absorción en los pulmones puede distribuirse extensamente por todo el cuerpo afectando a todo el organismo, aunque el órgano más afectado suele ser el pulmón.

Tricloroetileno

Se trata de un disolvente clorado utilizado inicialmente como anestésico, posteriormente como disolvente quitamanchas en la limpieza en seco y como ingrediente de pinturas, adhesivos o limpiadores y, más recientemente, como desengrasante para piezas metálicas, como modificador en la polimerización de cloruro de polivinilo, como materia prima intermedia para producir sustancias químicas cloradas y en varios productos de consumo doméstico en aerosol.
Es un neurotóxico y es cancerígeno para el ser humano por todas las vías de exposición.

Acrilonitrilo

El acrilonitrilo, también denominado cianuro de vinilo, es una sustancia de naturaleza orgánica que se presenta como un líquido transparente incoloro a temperatura y presión normal, con un olor característico ligeramente acre y una alta solubilidad en agua. Es una importante materia prima industrial utilizada casi exclusivamente como monómero para la síntesis de materiales poliméricos y resinas, así como para productos químicos básicos.
Su exposición puede provocar cáncer, es tóxico en caso de inhalación, por contacto con la piel y en caso de ingestión, puede irritar las vías respiratorias y provocar irritación cutánea, provoca lesiones oculares graves y puede provocar una reacción alérgica en la piel.