En el año 2023 se registraron 75.979 accidentes laborales de tráfico, que representan un 11,7 % del total de accidentes de trabajo. En ellos fallecieron 226 personas trabajadoras, un 29,7 % de los accidentes mortales de trabajo. Los accidentes laborales de tráfico (ALT) pueden ocurrir durante la jornada laboral (ALT en jornada) y también en el trayecto del domicilio al trabajo (ALT in itinere). Los primeros sumaron 22.332 accidentes, en los que contabilizaron 93 fallecidos, mientras que los segundos registraron 53.647 accidentes, con 133 fallecidos. Las profesiones que sufrieron los ALT en jornada con mayor intensidad fueron los Conductores/as y operadores/as de maquinaria móvil y Personal no cualificado de servicios. El grupo de edad más afectado fueron los/as jóvenes menores de 25 años. La incidencia fue mayor en los hombres, con un índice de incidencia 3,5 veces mayor que el de las mujeres. En el caso de los ALT in itinere, la incidencia es algo mayor en las mujeres. El grupo de edad más afectado fueron los/as jóvenes menores de 29 años. Entre las ocupaciones más afectadas destacaron los/as peones/as de la agricultura, pesca, construcción, industrias manufactureras y transportes; y el personal de los servicios de restauración y comercio.
Píldoras informativas
A continuación se presentan resúmenes de los estudios elaborados por el Observatorio con información clave estadística de salud laboral y prevención de riesgos laborales, interpretada por los expertos, para que pueda ser utilizada por la población en general.
En España, durante el año 2023, se registraron 647.495 accidentes de trabajo con baja. La mayoría se produjeron durante la jornada laboral, en concreto 558.936 accidentes, que suponen el 86,3 %. El resto, 88.559 accidentes, tuvieron lugar durante el trayecto del domicilio al centro de trabajo o viceversa; son los que se denominan accidentes de trabajo con baja in itínere.
Este informe realiza un análisis descriptivo de diversas variables del parte de accidente de trabajo (AT), con el fin de aportar una aproximación al perfil del accidente sufrido por personas trabajadoras cedidas por Empresas de Trabajo Temporal (ETT), a lo largo 2023. Desde 2021, este informe anual se basa en datos de siniestralidad consolidados y no con datos de avance como venía haciéndose hasta entonces.
Este este informe se centra en la priorización de las actividades económicas (a dos dígitos del CNAE) en función de dos parámetros: el índice de incidencia de Accidentes de trabajo en jornada ATJT (número de accidentes de trabajo por cada 100.000 trabajadores) y el número de personas trabajadoras que desarrollan su trabajo en una actividad concreta (personas afiliadas con la contingencia de accidente de trabajo cubierta). En 2023, el promedio de población trabajadora con la contingencia cubierta de AT/EP fue de 19.874.004 personas. A lo largo de ese año se notificaron 558.936 accidentes de trabajo en jornada con baja, resultando un índice de incidencia de 2.812,4 ATJT por 100.000 trabajadores/as. Las ramas prioritarias en función de la siniestralidad y la población a riesgo, es decir, aquellas que ocupan simultáneamente el cuartil superior de ambos indicadores, (índice de incidencia de ATJT y población) son: Construcción de edificios, Actividades de construcción especializada, Industria de la alimentación, Fabricación de productos metálicos, Asistencia en establecimientos residenciales, Servicios de alojamiento, Servicios a edificios y actividades de jardinería y Agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados.
En 2022 se produjeron 166.787 accidentes de trabajo durante la jornada laboral debidos a sobresfuerzos. Son mayoritariamente leves (99,9%) y hubo más hombres afectados (71,5%) que mujeres (28,5%). La media de edad de los afectados fue de 42 años, y llevaban desempeñando ese puesto de trabajo alrededor de cinco años y medio. Los esguinces y torceduras fueron la lesión más frecuente (38,7%) seguido de los casos que afectan a la espalda (32,8%).
En el año 2022 la población trabajadora por cuenta propia supone un 16,6 % del total (distribuidos en un 63,7% de hombres y 36,3% de mujeres), con una media de edad 5 años superior a la de los asalariados y mayor representación en los sectores Agrario y Construcción.
En este documento se han analizado 572 accidentes mortales investigados por los organismos técnicos de las Comunidades Autónomas, que han ocurrido en España durante los años 2020, 2021 y 2022, registrándose 2.160 causas entre todos ellos. La mayoría de las causas implicadas en los accidentes son de naturaleza organizativa, tanto relativas a la Organización del trabajo (29,6% de las causas) como a la Gestión de la prevención (27,3%), siendo también destacable el bloque de Factores individuales (15,4%).
En el año 2022 se registraron 73.522 accidentes laborales de tráfico que representan un 11,3 % del total de accidentes de trabajo. En ellos fallecieron 236 personas trabajadoras, un 27,3 % de los accidentes mortales de trabajo. Los accidentes laborales de tráfico (ALT) pueden ocurrir durante la jornada laboral (ALT en jornada) y también en el trayecto del domicilio al trabajo (ALT in itinere). Los primeros sumaron 22.974 accidentes, en los que contabilizaron 104 fallecidos, mientras que los segundos registraron 50.548 accidentes, con 132 fallecidos. Las profesiones que sufrieron los ALT en jornada con mayor intensidad fueron los Conductores y operadores de maquinaria móvil y Trabajadores no cualificados de servicios. El grupo de edad más afectado fueron los jóvenes menores de 25 años. La incidencia fue mayor en los hombres, con un índice de incidencia 3,8 veces mayor que el de las mujeres. En el caso de los ALT in itínere, la incidencia es algo mayor en las mujeres. El grupo de edad más afectado fueron los jóvenes menores de 29 años. Entre las ocupaciones más afectadas destacaron los peones de la agricultura, pesca, construcción, industrias manufactureras y transportes; y los trabajadores de restauración y comercio.
Este informe realiza un análisis descriptivo de diversas variables del parte de accidente de trabajo (AT), con el fin de aportar una aproximación al perfil del accidente sufrido por personas trabajadoras cedidas por Empresas de Trabajo Temporal (ETT), a lo largo 2022. Desde 2021, este informe anual se basa en datos de siniestralidad consolidados y no con datos de avance como venía haciéndose hasta entonces.
En España, durante el año 2022, se registraron 653.510 accidentes de trabajo con baja. La mayoría se produjeron durante la jornada laboral, en concreto 571.274 accidentes, que suponen el 87,4 %. El resto, 82.236 accidentes, tuvieron lugar durante el trayecto del domicilio al centro de trabajo o viceversa; son los que se denominan accidentes de trabajo con baja in itínere.
Este informe clasifica las actividades económicas priorizándolas en función de dos parámetros: el índice de incidencia de ATJT (número de accidentes de trabajo en jornada de trabajo por cada 100.000 trabajadores) y el número de personas trabajadoras que desarrollan su tarea en una actividad concreta (personas afiliadas con la contingencia de accidente de trabajo cubierta). Estos criterios permiten formular políticas preventivas concretas dirigidas a actuar en las actividades más vulnerables y que aglutinan un mayor número de personas trabajadoras que puedan beneficiarse de esas intervenciones específicas. En 2022 las actividades que destacaron como prioritarias entre los hombres fueron: Servicios a edificios y actividades de jardinería, Industria de la alimentación, Actividades de construcción especializada, Construcción de edificios, Fabricación de productos metálicos, excepto maquinaria y equipo, y Actividades relacionadas con el empleo. Para las trabajadoras las actividades prioritarias en 2022 fueron: Servicios de comidas y bebidas; Servicios a edificios y actividades de jardinería, Agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados, Actividades de servicios sociales sin alojamiento, Industria de la alimentación, Servicios de alojamiento; Actividades sanitarias, Asistencia en establecimientos residenciales, y Actividades relacionadas con el empleo. Al centrar el análisis en la siniestralidad de mayor gravedad (graves, muy graves y mortales) destacaron las siguientes actividades: Agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados, Transporte terrestre y por tubería, Construcción de edificios y Actividades de construcción especializada.
En 2021, el 11,3 % de la población total afiliada en España era de origen extranjero. Desde el punto de vista demográfico conviene remarcar que la población ocupada migrante: se distribuyó de forma prácticamente idéntica entre ambos sexos, procedía mayoritariamente del continente sudamericano (49 % de las mujeres y 40,2 % de los hombres) y de Europa (26,0 % de las mujeres y el 28,4 % de los hombres) y presentaba una edad media de 41,9 años para los hombres y de 42,5 para las mujeres, siendo las franjas de edad intermedias (de 35 a 54 años) las más pobladas para ambos sexos.
El presente informe tiene como objetivo proporcionar un primer diagnóstico de situación sobre el daño sobre la salud mental analizando cuatro fuentes de información secundarias complementarias: el Módulo especial EPA 2020 sobre accidentes laborales y problemas de salud relacionados con el trabajo (INE), la Encuesta Europea de Salud-España 2020 (INE), la base de patologías no traumáticas de la Seguridad Social (PANOTRATSS), con la que se analizan los trastornos mentales durante el periodo 2017-2020 y la base de accidentes de trabajo con baja (Delt@), con la que se analizan los accidentes con daño psíquico durante el periodo 2017-2020.
Según el módulo especial de la Encuesta de Población Activa (EPA) “Accidentes laborales y problemas de salud relacionados con el trabajo”, en el año 2020 el 3,9 % de la población trabajadora sufrió accidentes relacionados con su trabajo. El 80 % de las personas accidentadas tuvo lesiones, lo que significa que el 3,1 % de los/as trabajadores/as se lesiona por causa del trabajo.
En este estudio técnico se han analizado las patologías no traumáticas recogidas durante los últimos 11 años en el sistema PANOTRATSS, observándose que las patologías más frecuentes son las del aparato locomotor con una representación del 60,6% del total de los partes recogidos en el periodo 2011-2021. El segundo grupo de enfermedades más frecuentes son las de los sentidos con un 9,8%. Por otra parte, las enfermedades del sistema circulatorio son las que llevan asociados más días de baja, con una media de 159 días.
Este informe realiza un análisis descriptivo de diversas variables del parte de accidente de trabajo (AT), con el fin de aportar una aproximación al perfil del accidente sufrido por personas trabajadoras cedidas por Empresas de Trabajo Temporal (ETT), a lo largo 2021.
En España, durante el año 2021, se registraron 601.123 accidentes de trabajo con baja. La mayoría se produjeron durante la jornada laboral, en concreto 523.800 accidentes, que suponen el 87,1 %. El resto, 77.323 accidentes, tuvieron lugar durante el trayecto del domicilio al centro de trabajo o viceversa; son los que se denominan accidentes de trabajo con baja in itínere.
En el año 2021 se registraron 65.342 accidentes laborales de tráfico que representan un 10,9% del total de accidentes de trabajo. En ellos fallecieron 216 personas trabajadoras, un 29,1% de los accidentes mortales de trabajo. Los accidentes laborales de tráfico (ALT) pueden ocurrir durante la jornada laboral (ALT en jornada) y también en el trayecto del domicilio al trabajo (ALT in itinere). Los primeros sumaron 20.622 accidentes, en los que contabilizaron 100 fallecidos, mientras que los segundos registraron 44.720 accidentes, con 116 fallecidos. Las profesiones que sufrieron los ALT en jornada con mayor intensidad fueron los Conductores y operadores de maquinaria móvil y Trabajadores de servicios de protección y seguridad. El grupo de edad más afectado fueron los jóvenes menores de 25 años. La incidencia fue mayor en los hombres, con un índice de incidencia 3,8 veces mayor que el de las mujeres. En el caso de los ALT in itínere, la incidencia es algo mayor en las mujeres. El grupo de edad más afectado fueron los jóvenes menores de 29 años. Entre las ocupaciones más afectadas destacaron los peones de la agricultura, pesca, construcción, industrias manufactureras y transportes; y los trabajadores de restauración y comercio.
Este informe clasifica las actividades económicas priorizándolas en función de dos parámetros: el índice de incidencia de ATJT (número de accidentes de trabajo en jornada de trabajo por cada 100.000 trabajadores) y el número de personas trabajadoras que desarrollan su tarea en una actividad concreta (personas afiliadas con la contingencia de accidente de trabajo cubierta). Estos criterios permiten formular políticas preventivas concretas dirigidas a actuar en las actividades más vulnerables y que aglutinan un mayor número de personas trabajadoras que puedan beneficiarse de esas intervenciones específicas. En 2021 las actividades que destacaron como prioritarias entre los hombres fueron: Servicios a edificios y actividades de jardinería, Industria de la alimentación, Actividades de construcción especializada, Fabricación de productos metálicos, excepto maquinaria y equipo, Construcción de edificios y Actividades relacionadas con el empleo. Para las trabajadoras las actividades prioritarias en 2021 fueron: Agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados, Industria de la alimentación, Servicios de alojamiento; Servicios de comidas y bebidas; Actividades relacionadas con el empleo, Servicios a edificios y actividades de jardinería, Actividades sanitarias, Asistencia en establecimientos residenciales y Actividades de servicios sociales sin alojamiento. Al centrar el análisis en la siniestralidad de mayor gravedad (graves, muy graves y mortales) destacaron las siguientes actividades: Agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados, Transporte terrestre y por tubería, Construcción de edificios y Actividades de construcción especializada.
La Asistencia en establecimientos residenciales aparece de manera recurrente en la posición más destacable en los informes de Actividades Prioritarias de actuación preventiva basados en la siniestralidad laboral anual, debido a su elevado índice de incidencia y a la extensa población afiliada con la que cuenta.